viernes, 10 de diciembre de 2010

Torrente

Si pudiera abrazarte ahora mismo
huyamos de la agobiante vulgaridad
para desahacer esos laberintos
y remedar tus pasos
si pudiera llevarte delicadamente
por un expléndido valle
de tintes verdes y plateados.

Vení, acercate a mí
soltá tus manos y ese presente
puedo escucharte palpitar
el otoño ha teñido tu voz
yo quiero darte mis manos
soltá tu dolor en mi regazo
quedate conmigo, ya llega otro aurora.

1 comentario:

Anónimo dijo...

LAS TARDES VACIAS YA NO TRANSITARIAN EN VOS,
DORMIRÍAS EN PÉTALOS PERFUMADOS
QUE TE RECUERDEN MI PIEL.