viernes, 14 de enero de 2011

Madre Selva

Giro a contramano
estiro mis brazos para alcanzarte
leo cada pista que me dejaste
deslizo mis manos hasta este papel
entendeme, mi amor
el crepúsculo me vuelve torpe
podemos escapar de lógicas absurdas
que nos hacen cómplices y niños
diamante, chocolates y lanas
donde dormitaban ilusiones y roscas
en un día, una semana o un puñado de años.

Este espejo me devuelve ojos cansados
ancho mar, costa lejana
soy enemigo de torcer tu vuelo ocurrente
quisiera recostarme en tus relatos
tomando la dirección de los vientos
ciertamente este otoño no es tal
cantaré alegre tu canción silenciada
para despertar resonante tu querer
sé que el tiempo dejará caer el velo.

2 comentarios:

Pai dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Pai dijo...

Que bonito..